¿Qué piensan los ciudadanos cuándo se relacionan con la Administración tributaria?

El estudio “Opiniones y actitudes fiscales de los españoles”, conocido como barómetro fiscal, se basa en una encuesta de carácter anual organizada por el Instituto de Estudios Fiscales y consta de cuatro bloques de preguntas planteadas a los ciudadanos: tres bloques fijos cuyas preguntas se repiten cada año y un bloque específico cuyas preguntas cambian de año en año y que, generalmente, se centran en temas que se consideran de actualidad en el ámbito fiscal. 

Los bloques fijos que, al repetirse año tras año, permiten analizar la evolución de las opiniones de los ciudadanos y recogen preguntas que tratan de los siguientes temas: 

  • Bloque 1: los servicios públicos y las prestaciones y su relación con los impuestos pagados.
  • Bloque 2: el comportamiento de los contribuyentes. 
  • Bloque 3: la atención y los servicios a los contribuyentes. 

El bloque específico sería el cuarto bloque y puede considerarse como un espacio en el que los ciudadanos expresan su opinión sobre aspectos relacionados con el sistema tributario, los servicios públicos y las prestaciones proporcionadas por las administraciones públicas. Así, cada año el Instituto de Estudios Fiscales a través de este bloque específico puede conocer la opinión de los españoles acerca de temas en materia fiscal que afectan de una manera directa a su vida. 

En los últimos años este bloque ha tratado temas como el conocimiento de la fiscalidad por parte de los ciudadanos, la fiscalidad verde y saludable o los impuestos sobre la riqueza, obteniendo conclusiones tan interesantes como que los ciudadanos conocen con carácter general lo que supone la progresividad del IRPF o que hay un desconocimiento generalizado de qué administración es la destinataria de los diferentes tributos, la opinión positiva de los ciudadanos respecto a la eficacia de la fiscalidad verde y saludable o que más de tres cuartas partes de los ciudadanos opinan que las personas con mayor riqueza deberían pagar más de lo que lo hacen en la actualidad. 

Vemos pues la enorme utilidad que tiene este bloque específico del barómetro fiscal para que los responsables de la política fiscal, los gestores públicos y los ciudadanos conozcan cómo se perciben aspectos del sistema tributario, los servicios públicos y las prestaciones que, por su carácter coyuntural, resultan de vital importancia para la sociedad española. En particular, para los responsables políticos y los gestores, conocer esta opinión de los ciudadanos permite, en la práctica, tomar mejores decisiones.

Benjamín Franklin escribió que la muerte y los impuestos son las únicas cosas que, con certeza, sabemos que nos ocurrirán. Esta irónica y aguda cita nos recuerda que es ineludible pagar impuestos para que las administraciones públicas puedan ofrecer a sus ciudadanos una sanidad moderna y eficaz, una educación que prepare a niños y jóvenes para el futuro o unos servicios sociales que protejan a los más vulnerables. En resumen, los impuestos son imprescindibles para ofrecer unos servicios públicos de calidad. Asumiendo pues que el acto de pagar impuestos resulta imprescindible en una sociedad moderna, lo que corresponde a las administraciones públicas es hacer que el ciudadano se sienta más confortable en su relación con la Administración Tributaria. Por ello, el Instituto de Estudios Fiscales eligió como bloque específico del último barómetro fiscal, el de 2022, la percepción de los ciudadanos respecto a su relación con la Administración Tributaria. 

En particular, interesaba conocer la opinión de los ciudadanos acerca de la documentación que reciben de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), su sentimiento a la hora de realizar trámites con dicha agencia y si creen que necesitarían un asesor fiscal.

Respecto al primer aspecto, los ciudadanos entrevistados entienden que la claridad de los documentos que reciben de la AEAT podría considerarse ligeramente por encima del aprobado. Respecto al tono de estos documentos, el adjetivo más mencionado fue “neutro”, seguido a distancia de “intransigente” y “amenazante”. En relación con qué aspectos de los documentos valoran más, los ciudadanos encuestados mencionaron la identificación del procedimiento al que se refiere el documento como el más importante, aunque en general todos los aspectos propuestos recibieron una alta valoración.

En relación con el sentimiento que genera recibir una notificación de la AEAT, más de la mitad de los encuestados respondió que el sentimiento era de preocupación. Preguntados por qué aspectos podrían reducir tal preocupación, la respuesta más repetida fue el saber que la notificación no implicaba tener que pagar, seguida de que se deje claro lo que se pide en la notificación y también que el ciudadano que la recibe tenga la certeza de haber comprendido el contenido del documento.

En cuanto a la posibilidad de acudir a un asesor fiscal, el 67% de los ciudadanos entrevistados contestó que no lo hacía y, al preguntar por los motivos, el 56% respondió que no lo necesitaban, mientras que el 35% dijo no poder asumir su coste.

El siguiente barómetro fiscal, el correspondiente al año 2023, se encuentra en fase de planificación y, tan pronto se hayan finalizado todos los trabajos en relación al mismo, se procederá a la publicación en la web de sociología fiscal del Instituto de Estudios Fiscales, del correspondiente informe, los microdatos relativos a dicho año 2023 y la actualización de la matriz de datos 2003-2023.

Carlos Díaz Muriel

Coordinador de Área en el Instituto de Estudios Fiscales

Deja una respuesta

Los comentarios serán moderados para poder ser publicados

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Gracias